El gobierno bonaerense derogó este jueves la resolución que impedía la utilización de dispositivos tecnológicos para uso pedagógico en las aulas, entre ellos los celulares, aunque dejó a criterio de cada establecimiento escolar si habilita o no su utilización, según anunció el director general de Cultura y Educación, Alejandro Finocchiaro.
Desde 2006 existía la prohibición del teléfonos celulares en las escuelas públicas tanto para docentes como alumnos. A través de la resolución 1728, firmada por la entonces titular de la cartera educativa, Adriana Puiggrós, prohibió en todo el sistema educativo la utilización de celulares dentro del ámbito escolar y en el horario de clase.
Las autoridades educativas aseguraban que el uso de teléfonos en el aula “descentra y desconcentra el proceso de enseñanza-aprendizaje” y sostenían que “para cada medio de comunicación existe un espacio propio de utilización”.
El proyecto, había sido aprobado en 2005 por unanimidad en la Cámara Baja e impulsado por el diputado radical José Ángel Del Valle, que lo fundamentó al sostener que el uso de los aparatos en el aula “genera trastornos en el aprendizaje” y posibilita que se los utilice como “machetes electrónicos”, para copiarse en los exámenes.





