Un arquitecto chino diseñó su propio lugar de trabajo y para ello, creó una estructura de casi 80 metros cuadrados en dos plantas, la cual llevó aproximadamente cuatro meses en terminar.
Li Rongjun vive en la localidad china de Chongqing y desarrolló la idea de tener su propia oficina, pero no de modo convencional.
El arquitecto egresado de la Universidad de Ciencias y Tecnología de Mongolia decidió usar 8 mil quinientas botellas de cerveza para crear su espacio “que pueda combinar belleza y pragmatismo”
Rongjun conformó una estructura de dos pisos, cuya planta superior está estructurada con las botellas distribuidas en 40 capas, mientras la parte baja está construida con ladrillo y cemento.
“Este edificio es mi tarjeta de presentación para futuros negocios. Los inversores podrán ver mi trabajo en la vida real y admirar mi talento”, reconoció el joven, según publica el sitio Zigmaz.
El costo para desarrollar el proyecto fue de aproximadamente 11 mil dólares, unos 70 mil yuanes.
La construcción, la cual su propio dueño reconoció dijo que “de noche se ve muy bonito este lugar” hacia las afueras de la ofocina
“Cuando se encienden las luces de la habitación la luz verde llega hasta la ruta”, comentó Li Yan, un vecino de Rongjun.
Por último, un arquitecto de la misma localidad que Chongqing Tang Zhe, reconoció que la construcción es una creación artística pero que no puede ser comercializada, ya que no tienen de ningún muro de contención y el soporte de las botellas es limitado.
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