El jefe de Gabinete reconoció que nacionalizar la elección bonaerense debilitó al oficialismo. Aseguró que Kicillof “jugó con inteligencia” y denunció intentos de desestabilización.
Guillermo Francos analizó las consecuencias de los comicios legislativos en la provincia de Buenos Aires y admitió: “Sin dudas nacionalizar una elección distrital fue un error”. La frase apuntó directamente a la estrategia oficialista que buscó instalar al presidente Javier Milei como eje de la campaña bonaerense, en un distrito donde el oficialismo finalmente perdió con amplitud.
El jefe de Gabinete contrastó esa decisión con la jugada de Axel Kicillof. “El gobierno de la provincia fue inteligente, porque hizo una jugada que le permitió a Kicillof dejar el kirchnerismo de lado y convertirse él en el referente del peronismo desde la provincia”, evaluó. Para Francos, esa maniobra, al separar el calendario bonaerense de la elección nacional, resultó determinante en el resultado adverso para el oficialismo.
Diferencia entre la disputa provincial y la nacional
El ministro coordinador buscó marcar un límite entre la elección bonaerense y la que se avecina a nivel nacional. “La gente tendrá que decidir si le da el apoyo al Presidente para que haga las reformas que queremos hacer en la segunda parte del mandato”, planteó. Con esa definición, intentó encuadrar los comicios de octubre en clave legislativa, como una pulseada por la capacidad del oficialismo para avanzar en el Congreso con su programa de reformas.
Señalamientos a la oposición
Francos también dedicó parte de su mensaje a cuestionar el clima político tras la derrota en Buenos Aires. Rechazó las críticas opositoras y sostuvo que existe un escenario que busca “desestabilizar la imagen” del Gobierno de Milei. “No tengo dudas, hay un intento de desestabilizar la imagen que tiene un gobierno”, afirmó.
De ese modo, el funcionario combinó la autocrítica sobre la estrategia electoral con un mensaje de advertencia: la derrota bonaerense no debería leerse como un anticipo inevitable del resultado nacional, sino como una consecuencia de un error táctico que, según reconoció, favoreció a Axel Kicillof en su consolidación como figura opositora.
Domingo electoral
El domingo pasado, la lista de Fuerza Patria —frente armado por Kicillof para unificar al peronismo— obtuvo el 47,3% de los más de ocho millones de votos bonaerenses. La Alianza La Libertad Avanza, con Milei en el centro de la campaña, quedó lejos, con el 33,7%.
“Es para Axel, la conducción”, cantaron los militantes en la noche de los festejos, donde también resonó el “Se siente, se siente, Axel presidente”. Para el mandatario provincial, el resultado expresó un mensaje directo hacia el oficialismo: “El resultado de las urnas es un rechazo contundente al modelo de ajuste, maltrato y agresión del Gobierno de Milei”.