El abogado señaló al acusado Máximo Thomsen como “líder de la manada”. También se expresaron los abogados Facundo y Fabián Améndola.
En la primera jornada de alegatos del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, Fernando Burlando, abogado de los padres del joven asesinado en 2020 en Villa Gesell, adhirió al pedido de la fiscalía de condenar a prisión perpetua a los ocho acusados del crimen, y sostuvo que “todos” los imputados tuvieron la “voluntad de matar” y planearon una “cacería humana”.
“La imagen de Fernando de rodillas pidiendo clemencia. Esa es la imagen que para esta representación justifica ni más ni menos el pedido de prisión perpetua para los acusados”, afirmó el letrado del particular damnificado en su exposición ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Dolores.
“Todos, absolutamente todos participaron, todos asesinaron a Fernando. Nuestro reclamo de Justicia ante lo que no dudamos en llamar el suplicio de Fernando, la responsabilidad de quienes fueron sus ocho asesinos, se resume fundamentalmente en dos momentos de salvajismo y de horror”, describió.
“Fernando de rodillas, sus manos en el piso y sin siquiera mirar, porque tal vez entendió que esa mirada podía significar una falta de respeto, levanta su mano y pide clemencia. La respuesta fue una patada a la cabeza, una más y otra más”, indicó Burlando, quien describió a la víctima en ese momento de la agresión como “una bolsa de papas”.
Para el letrado, los acusados “tomaron la decisión y mataron” y remarcó: “Hubo voluntad de matar y por eso mataron. Tendieron esa madrugada sobre Fernando un verdadero cerco humano poder actuar sobre seguro.”
“Los ‘azotadores’ estaban ahí cerca, pegados y decidían el momento oportuno para castigar a Fernando a mansalva. Previamente lo marcaron, lo cercaron, esperaron el momento justo en que se retiran los funcionarios policiales así no tenían ningún tipo de valla, nada que los frene”, señaló.
Según el letrado, “los golpes que fueron como disparos, cada golpe era un disparo, cada patada era un tiro”, por lo que Fernando “fue fusilado a golpes y a patadas”.
El abogado señaló al acusado Máximo Thomsen como “líder de la manada”, quien fue acompañado por “sus obsecuentes”
“Anunció el desenlace con un gesto por demás elocuente, el dedo pasándoselo por la garganta”, recordó Burlando sobre la seña de Thomsen.
“Fernando tenía una vida por delante, sueños por cumplir, que los acusados le arrebataron por la simple decisión de matar. Mataron por matar, por ganar, por un empujón, por llevarse un trofeo en la vida. No les importó a quién, evidentemente desde el primer cruce que tuvieron con Fernando su plan fue matar”, apuntó.
En otro pasaje de sus casi dos horas de exposición, Burlando precisó que fue “un poco más de siete minutos lo que les llevó delinear y abordar a Fernando esperando el momento oportuno” y que “la voraz carnicería se extendió cincuenta segundos”
También en sus roles como abogados del particular damnificado se expresaron Facundo y Fabián Améndola.
El primero hizo hincapié en repasar detalladamente la secuencia de la escena del crimen y los mensajes que se mandaron entre sí los acusados y con otras personas, tras asesinar a Fernando Báez Sosa.
Por su parte, Fabián, fue más breve en su intervención, y puso el foco en que no se puede acreditar la cantidad de ingesta de alcohol de esa noche de los acusados, porque no se les realizaron pruebas ni interrogatorios hasta la tarde del día siguiente, y señaló que el lo que se ve en los videos, ninguno estaba en situación de ebriedad y con su estado de conciencia alterado.
Los tres abogados coincidieron en que todos los acusados estaban de acuerdo en su accionar y que no hubo roles, porque todos golpearon a la víctima y evitaron que pudiera ser asistido.
Antes de terminar la audiencia, Burlando hizo reproducir una serie de videos sobre el momento del hecho para ilustrar su exposición sobre cada uno de los imputados, a los que calificó como “una manada de asesinos”.
Finalmente, Burlando pidió la prisión perpetua para los ocho acusados como “coautores” de los mismos delitos que señaló la fiscalía.
Al concluir, el tribunal pasó a un nuevo cuarto intermedio hasta mañana al mediodía, cuando será el turno de alegar del defensor de los acusados, Hugo Tomei, quien buscará una calificación del hecho más leve y con una menor pena en expectativa.