La Legislatura adhirió a la Ley Nacional Nº 26.872, de “Patología mamaria y cirugía reconstructiva”.
La Cámara de Diputados sancionó un proyecto de ley que adhiere a la Ley Nacional Nº 26.872, de “Patología mamaria y cirugía reconstructiva”.
Así, se establece que la Provincia incorpore “la cobertura de la cirugía reconstructiva como consecuencia de una mastectomía por patología mamaria, así como la provisión de las prótesis correspondientes”.
E insta a que “las obras sociales, las entidades de medicina prepaga , los Establecimientos de Salud Públicos y toda otra figura jurídica que brinde cobertura Medico Asistencial en la Provincia de Buenos Aires, deberán adecuarse a las exigencias de la presente Ley”.
Escenario
El cáncer de mama es la enfermedad más frecuente en las mujeres. Mundialmente la padecen una de cada ocho mujeres, siendo el tipo de cáncer que más crece, anualmente se estima que se registran 40 casos nuevos por cada 100.000 habitantes. Según la OMS, enfermarán unas 70.000 mujeres sudamericanas, de las cuales 30.000 lo harán con riesgo de muerte.
Y en cuanto a las consecuencias del cáncer de mama sobre la femineidad, la identidad y función sexual femenina, y las relaciones sexuales, pueden ser dramáticamente afectadas, física y emocionalmente, por muchos cambios y desafíos que la mujer tiene que enfrentar cuando el diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama irrumpe en su vida y en la de sus familiares. Por un lado, se pierde la integridad del cuerpo por el tratamiento (mastectomía, quimioterapia, etc.); por el otro, hay cambios importantes en las funciones y estructuras corporales.
“Culturalmente, donde parte de la identidad femenina está depositada en las mamas, la mastectomia, es vivida por las mujeres afectadas, como una pérdida, un ataque a su integridad física, a su valoración como mujer”, se detalla en el proyecto presentado por el senador del FpV-PJ Marcelo Carignani.
Es por eso que cuando se habla de cáncer de mama, la cirugía es el primer tratamiento que se realiza con intención curativa. En la Argentina, cada 100 pacientes con cáncer de mama que se operan, en 70 a 80 de esos casos se puede efectuar el tratamiento conservando la mama y, en el 20 a 30% restante, se efectuará la extirpación de toda la glándula, aunque, en estos últimos casos, la mayoría de las veces se realiza la reconstrucción mamaria en el mismo momento.
La reconstrucción mamaria constituye, desde hace tiempo, una parte fundamental del tratamiento del cáncer de mama y pasó por diferentes estadíos: de estar contraindicada, a ser criticada, luego aceptada y ahora solicitada como parte integral del tratamiento.
Se da demostrado que no pone en riesgo el control de la enfermedad, ni obstaculiza su diagnóstico, ni su tratamiento. Los mejores resultados se obtienen cuando se realiza en forma inmediata; de esta forma brinda importantes beneficios psicológicos, ayudando a preservar la imagen corporal y la autoestima y, además, tiene menores costos económicos. Por lo tanto es una opción válida en la mayoría de los casos, siempre evaluando el estado general de la paciente y los tratamientos que vaya a necesitar en el corto plazo.
“En este sentido el cáncer es uno de los problemas que se trata de prevenir, en forma continua, es por ello que se deben realizar acciones de políticas públicas de inclusión social para favorecer a estas personas que padecen esta enfermedad y han sido sometidas o necesitan someterse a prácticas médicas que les mejore la calidad de vida”, se concluye en los fundamentos.