En la primera audiencia de la segunda semana del juicio por el asesinato de Fernando Báez Sosa, ocurrido hace casi tres años, uno de los testigos afirmó que, aún dentro del boliche, cuando era sacado a la fuerza por personal de seguridad, luego de un incidente en el atestado local bailable, uno de los imputados hizo un gesto amenazante en dirección al grupo donde estaba la víctima. Eso fue solo unos pocos minutos antes del ataque mortal en la calle.
El policía bonaerense Ramón Rueda afirmó ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°1 de Dolores que en uno de los videos que figuran en la causa se ve a uno de los ocho acusados haciendo un gesto amenazante dentro de Le Brique, la madrugada del 18 de enero de 2020, justo antes del homicidio de Fernando Báez Sosa.
“Hizo una seña hacia la pista con el dedo índice de la mano derecha, el típico gesto de que pasa el dedo por el cuello, en señal de amenaza”, indicó Rueda. Apenas terminó de declarar, el abogado de los acusados, Hugo Tomei, abrió los brazos y juntó a los ocho acusados para decirles algo. Los imputados estaban, por primera vez desde el inicio del juicio, sin barbijo y se cambiaron de asientos.
Hubo más declaraciones importantes en la audiencia de hoy ante el Tribunal Oral Criminal N°1 de Dolores. Entre ellas, la del forense que hizo la autopsia al cuerpo de Fernando. “Nunca vi algo semejante”, fue la frase de Diego Duarte, el forense del caso, cuando se refirió al estado de la víctima cuando llegó a la morgue. Tenía “lesiones incompatibles con la vida”, ya que “el paciente sufrió daño en todo el sistema nervioso central, tanto cerebro, cerebelo, tronco cerebral, no había una lesión única, eran múltiples”. “No hubiera tenido posibilidades de salvarse”, testificó Duarte.
Además, el médico forense señaló que el cuadro con el que encontró al cuerpo de Fernando fue el de una “visible saña sobre el cuerpo”.
Cuando le consultaron a Duarte por una huella que pudieron reconocer en el cuerpo de Báez, el médico lo confirmó: “Las marcas que observamos nosotros son muy evidentes y compatibles con la figura que fue imprimida por una zapatilla”. Además, sumado a esto, agregó que a algunos de los imputados les hicieron un “reconocimiento” y, como resultado, presentaron “marcas compatibles con haber golpeado”.
Lo que sufrió Fernando fue un “shock neurogénico”, que se produce cuando el cerebro “sufre un daño importante, donde deja de funcionar, por irrigación, por vascularización, por sangrado, entonces no tiene los nutrientes suficientes para continuar con la vida”. Por último, concluyendo, agregó que lo que probablemente sufrió Fernando fue un traumatismo “nocaut”, y que es posible que algunas heridas sean post mortem. La autopsia detectó una lesión cerebral aguda que produjo la muerte instantánea.
Los padres de Fernando Báez Sosa no presenciaron la declaración de la autopsia del médico Diego Duarte por recomendación de sus abogados, Fernando Burlando, Fabián Améndola, Germán Facio y Facundo Améndola.