María Rosa Fullone tenía 56 años y trabajaba en el Servicio de Emergencias y Urgencias del Fernández. Además tenía su propia clínica de Dermatología y Medicina Estética y atendía a famosos.
Una médica del Hospital Fernández murió de coronavirus, mientras esperaba su turno para ser vacunada. María Rosa Fullone, de 56 años, trabajaba hace 12 en ese centro de salud como ayudante de guardias especiales y fue parte del 20% de médicos que no quiso anotarse en la primera tanda de vacunas.
“El hospital había recibido en diciembre un total de 1400 vacunas de primera y segunda dosis, cuya prioridad era el servicio de terapia intensiva, guardia y emergencias y los servicios de clínica médica, que están más en contacto con pacientes de Covid”, explicó el medico. Contó también que se aplicaron 1150 y se compartió el remanente con dos centros privados y al Hospital Ramos Mejía.
Según Previgliano, tras publicarse el artículo de The Lancet la médica “decidió inocularse” y “tenía su turno para el 23 de febrero, pero se enfermó antes.
El medico destacó que no faltaron vacunas y que “en el Ministerio de Salud de la Ciudad la vacunación se hizo en forma transparente y en forma categórica de acuerdo a las prioridades y al cronograma de salud”. El hospital está ahora esperando la llegada del remanente de vacunas para quienes no quisieron vacunarse en la primera tanda.