Un agente del Servicio Penitenciario Federal (SPB) que vive en Coronel Vidal, dio positivo de coronavirus. El nuevo caso enciende más las alarmas debido a que se desempeña en la alcaidía N°44 de Batán y es el segundo caso detectado en las últimas 48 horas.
Un agente del Servicio Penitenciario Federal (SPB) que vive en Coronel Vidal, dio positivo de coronavirus. El nuevo caso enciende más las alarmas debido a que se desempeña en la alcaidía N°44 de Batán y es el segundo caso detectado en las últimas 48 horas.
Fuentes consultadas por 0223, confirmaron que el hombre tiene 35 años y se encuentra aislado junto a un grupo de trabajadores del SPB. Según se supo, había estado en contacto con la enfermera que el viernes dio positivo de Covid-19, que asimismo se desempeñaba como personal de salud en el Hospital Houssay, el mayor foco de contagios de los últimos días.
El agente penitenciario afectado por Covid-19, trabaja en la guardia de seguridad exterior de la alcaidía, en el sector extramuros. Por este riesgo epidemiológico, ya se aislaron preventivamente a 15 personas.
Desde el Municipio de Mar Chiquita, informaron que el paciente de 35 años que reside en Coronel Vidal, está aislado en su domicilio, “clínicamente estable y con seguimiento médico”.
Luego de que una enfermera diera positivo, el viernes último, desde el SPB informaron que la mujer cumplió su última guardia en la alcaidía el 1 de julio pasado y las autoridades de la dependencia penitenciaria dispusieron aislar de manera preventiva a un interno que colabora en la Sección Sanidad y 14 agentes que compartieron la guardia con la oficial infectada.
Según destacaron, mientras la enfermera permaneció en el establecimiento penitenciario, cumplió con las medidas de bioseguridad que estipula el protocolo: uso de tapabocas y limpieza frecuente de manos.
Las autoridades penitenciarias y de Salud Penitenciaria llevaron a cabo encuentros con los referentes de cada uno de los pabellones para informar detalles de la situación de salud del oficial y llevar tranquilidad al resto población carcelaria ya que se cumplieron con todas las medidas de bioseguridad.
Ante la situación, los agentes especializados del área sanitaria desinfectaron de manera más profunda los sectores por los que transitó la enfermera.
A comienzos de mayo, hubo dos casos sospechosos dentro de la unidad carcelaria, que fueron derivados al Hospital Interzonal. Poco después, se comprobó mediante un test, que no eran poseedores del virus. 0223.