El sector va a pedir un 30 por ciento más cláusula gatillo, pero la oferta del Gobierno estaría lejos
Después de más de tres meses sin reunirse, este lunes el gobierno provincial y los gremios docentes bonaerenses volverán a sentarse en la mesa de negociaciones para lo que será una “partida” crucial: de ese tira y afloja dependerá si los maestros nucleados en el Frente Gremial Docente regresan o no a las aulas tras finalizar el receso invernal.
El encuentro está pautado para las 15 horas en el ministerio de Economía, y en los últimos días ya comenzaron a circular definiciones y frases contundentes previo a la negociación que caldearon el ambiente.
Los sindicatos, por su parte, pidieron una “actitud responsable” del ejecutivo provincial; y la gobernadora María Eugenia Vidal, que los chicos “no sean rehenes de las decisiones de dirigentes gremiales” y que “puedan comenzar las clases”.
En respuesta a Vidal, Roberto Baradel salió al cruce y lanzó: “Lo que toma de rehenes a los chicos es el abandono, desidia y las mentiras de la Gobernadora. Los trabajadores no tomamos a nadie de rehén, reclamamos lo que es justo”.
En cuanto a los montos, desde Suteba señalaron que “tenemos el salario congelado desde el 2017 y exigimos el 30 por ciento con cláusula gatillo”. Asimismo, los gremialistas expresaron la necesidad de la “incorporación ya del 16,1% que es la inflación de los últimos seis meses del Indec”.
Desde el gobierno, en tanto, aunque no se adelantaron cifras trascendió que la oferta difícilmente supere el 20 por ciento, más allá de que los índices de inflación previstos y los acuerdos cerrados para otros sectores superan ampliamente ese porcentaje.