El uso de materiales aislantes junto con el manejo más eficiente de equipos se traduce en menores gastos para los consumidores. Sin embargo, empresas del sector reconocen que el proceso de incorporación de estos productos a la edificación y el uso eficiente de la energía es todavía muy incipiente en nuestro pais.
Sin embargo, también coinciden en que el proceso de incorporación de estos productos a la edificación y el uso eficiente de la energía es todavía muy incipiente en Argentina.
“La estrategia más eficiente para generar ahorro de energía es contar con buenos niveles de aislación en las viviendas”, destacó Federico Zuñiga, asesor de la Asociación Nacional de Industrias de Materiales Aislantes (Andima), quien afirmó que “se puede alcanzar un ahorro energético de 35%”.
El experto precisó que la aislación térmica de una vivienda “es para siempre, como el ladrillo”, y puntualizó que el empleo de estos materiales para construir representa “un porcentaje muy bajo en el costo de la vivienda, de 2% o 3%”.
Por su parte, Marcelo Fiszner, gerente de Dow, destacó que “si uso el aire acondicionado y no dejo salir al frío porque el edificio está bien aislado, se ahorra energía”, y estimó que “en una ciudad como Buenos Aires, se puede ahorrar hasta 60% en el uso de aire acondicionado y 50% en calefacción, lo que significa una reducción entre 30% y 70% en la cuenta de luz y de gas”.
Dow desarrolló las tecnologías Voracor y Voratherm: paneles de poliuretanos que permiten un aislamiento térmico un 700% mejor que el ladrillo, un 50% mejor que la “lana de vidrio” y que el poliestireno expandido, los materiales más difundidos para la construcción.
“El costo es el mismo que el de cemento”, aseguró Fiszner, quien explicó que “si se reemplaza cemento por poliuretano en una construcción, el costo es el mismo pero se ahorra un 30% en el tiempo de la construcción”.
Aparte del ahorro que se puede obtener a partir de los materiales empleados, también es posible reducir el consumo con mejores manejos de la iluminación y los equipos eléctricos.
En esto trabaja, Green Building 4 All, compañía de origen francés que asesora a empresas en materia de ahorro energético, de manera de reducir sus costos, aumentar su rentabilidad y también su competitividad.
“En Argentina trabajamos fundamentalmente con supermercados (Carrefour), fábricas automotrices (Volkswagen), pequeñas y medianas empresas y también compañías constructoras”, precisó el fundador de Green Building 4 All, Benjamín Crevan, al subrayar que el objetivo de la consultora es “ayudar a bajar el consumo de energía y gracias a eso mejorar la rentabilidad del negocio”.
Explicó que “en las áreas de iluminación, producción de frío alimentario y de vapor, se puede alcanzar un manejo muy eficiente de la energía”, y subrayó que “hay muy pocas industrias donde los encargados de operaciones entienden cuál es el consumo energético de los equipos y cómo se comportan”.
Al respecto, indicó que “muchas veces un equipo está mal programado, tiene alguna fuga de gas, o pérdidas de otro tipo”, y aseguró que “una vez identificado el comportamiento del instrumental, es posible alcanzar un ahorro de 10% a 15%, solo en esto y sin una inversión adicional”.