Previo a la aprobación del presupuesto-
Cascallares planteó que “no es momento” de discutir el reingreso de Sergio Massa ya que los alcaldes deben abocarse a “otro tipo de problemas”. Menéndez, de Merlo, señaló que “la población necesita que la clase política fije políticas de Estado”.
Con la bandera blanca en mano, varios intendentes del Frente para la Victoria solicitaron una tregua en la disputa interna por la conducción del Partido Justicialista. ¿El principal escollo? Reestructurar las gestiones municipales que se encuentran en un estado crítico.
El jefe comunal de Almirante Brown, Mariano Cascallares, aseguró que “no es momento” de “analizar” la gravitación de Massa en el peronismo ni la reorganización del PJ, ya que “todos” los alcaldes bonaerenses tienen “otros tipos de problemas”.
“Estoy muy preocupado y ocupado en otros temas. Mi preocupación es que funcione bien el municipio, y en ese mismo marco trabajar y acercar posiciones”, indicó el dirigente peronista a la agencia DYN. Además destacó que, junto a algunos de sus pares del PJ, le “toca” integrar la Comisión de Trabajo encargada de negociar con el gobierno de Vidal los términos del endeudamiento que pretende el gobierno provincial, el punto que destrabaría la sanción del Presupuesto 2016.
“En algún momento llegará, más cerca de las próximas elecciones, el debate y la discusión de las cuestiones partidarias. Este momento es para resolver problemas de los vecinos y avanzar en temas como el Presupuesto, que nos incumben a todos”, concluyó el exfuncionario del gobierno de Daniel Scioli.
Por otra parte, y en el mismo sentido, el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez, consideró que “la población necesita que la clase política fije políticas de Estado” porque “se es parte de la solución o del problema”.
A su vez, indicó que el peronismo es “uno de los movimientos más abiertos y democráticos del mundo”, por lo que si Massa “quiere representarlo, podrá venir en caso de que puedan dirimirse las diferencias en una elección interna”.