“Las pérdidas anunciadas son consecuencia de decisiones necesarias tomadas en el marco de la Estrategia 2020, que harán el banco más eficiente y más sencillo”, dijo el jefe de la entidad, John Cryan, según un cable de la agencia DPA.

El británico dirige el Deutsche Bank desde el año pasado. Para Cryan, es necesario reducir los riesgos a los que está expuesto Deutsche Bank y “cerrar cuanto antes todos los litigios” legales que mantiene el primer banco alemán.

Según comunicó en un escrito anoche, Deutsche Bank cerró 2015 con pérdidas netas de 6.700 millones de euros (7.300 millones de dólares) debido a costos de reestructuración y gastos judiciales.

Es la mayor pérdida anual registrada por Deutsche Bank y el segundo cierre negativo desde 2008. Entonces perdió 3.900 millones de euros. Los analistas esperaban cifras negativas de unos 5.000 millones de euros.

La entidad financiera anunció recientemente que es probable que cancele el pago de dividendos a los accionistas en 2016 y 2017. En el cuarto trimestre, Deutsche Bank dedicó 1.200 millones de euros a conciliar conflictos, que el banco estima alcanzarán los 5.200 millones de euros en todo el año. A estos se suman otros 1.000 millones de euros para la reducción de puestos de trabajo.

El Deutsche Bank también registró una caída del 15 por ciento en los beneficios en el sector de banca corporativa y finanzas, con ganancias por 6.600 millones de euros en el último trimestre.