En paralelo, el Gobierno habilitó el proceso de presentación de avales e impugnaciones previsto para la designación de jueces de la Corte.
Y en ese escenario, Rosenkrantz recibió más de dos mil apoyos. Entre ellos, de la AMIA, la Comunidad Homosexual Argentina (CHA) y prestigiosos juristas y organismos de la Argentina y el exterior.
También recibió el respaldo de Rafael Bielsa, Juan José Campanella, Marcelo Birmajer, Mauricio Wainrot, José Eduardo Abadi y Gustavo Grobocopatel, entre otros.
Todos ellos enviaron cartas de apoyo al Ministerio de Justicia y Derechos Humanos y al Senado.
Rafael Bielsa, jurista y ex canciller del gobierno de Néstor Kirchner, respaldó también al otro juez designado por el presidente Mauricio Macri, Horacio Rosatti. “Ambos me merecen el mejor de los conceptos y pienso que pueden ser óptimos jueces de Corte en función de sus méritos sustantivos”, afirmó.
También avalaron a Rosenkrantz el jurista radical Ricardo Gil Lavedra y Jorge Valerga Aráoz.
Desde el kirchnerismo se cuestionó su relación con el Grupo Clarín, a quien defendió desde su bufete de abogados.
Rosenkrantz es recordado porque fue fundador de la Asociación para la Defensa de la Competencia (ADC) fundada el 21 de noviembre de 2000. La ONG de Bouzat y Rosenkrantz presentó un amparo que favoreció a Cablevisión y que contrariaba una resolución de la Secretaría de Comunicaciones (100/10) donde se declaraba la caducidad de la licencia para prestar servicios de internet y telecomunicaciones que estaban bajo la órbita de Fibertel. Firma que fue denunciada en 2011 por haber sido absorbida por Cablevisión en forma irregular.
En su momento, la ONG defendía a Clarín y Cablevisión por la resolución de la Secretaría de Comunicaciones que le otorgaría “concentración económica y/o influencia sustancial” a empresas como Telefónica y Telecom al referirse a la irregularidad de Fibertel.