Complejos análisis biomédicos se harán con investigadores y tecnología de excelencia en Argentina

Así lo aseguró el director del Instituto de Biología Molecular y Celular de Rosario, Alejandro Vila, quien dijo que Argentina puede hacer análisis metabólicos y de productos biofarmacéuticos con una flamante plataforma de biología estructural, que reúne investigadores calificados con tecnología de frontera para lograr desarrollos de medicina personalizada.

La Plataforma Argentina de Biología Estructural y Metabolómica “integra equipamiento y recursos humanos para hacer análisis biológico estructural, con capacidad de resolver localmente problemas que son complejos”, dijo Vila a Télam.

Además, atiende “pedidos de análisis de la industria farmacéutica para validar productos, que son relativamente rápidos y no estaban disponibles anteriormente en el país”, agregó.

Vila, que también es director de la Plataforma afirmó que “es importante tener un perfil metabólico de una persona e inclusive hacer seguimiento de pacientes sanos para tener uno de población de nuestra propia región, porque aún una población étnica similar puede diferir por cambios ambientales”.

“El objetivo a largo plazo es la medicina personalizada, que no se trata de hacer un remedio para cada persona sino de saber la susceptibilidad de un paciente a determinado medicamento, o cuál es la dosis adecuada, que en menos de una década tendría que ser rutina” en la práctica médica.

El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva financió con 11 millones de pesos el equipamiento de última generación para investigar en biomedicina, biotecnología, biofarmacéutica y análisis metabólico.

La plataforma es administrada a través de dos nodos, uno en el IBR, dependiente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas-Conicet, y otro en la Fundación Instituto Leloir, que aportaron casi seis millones como contraparte.

El nuevo equipamiento, ya operativo, incluye un difractómetro de Rayos X de microfoco; un espectrómetro de Resonancia Magnética Nuclear de 700 MHz -el de mayor campo en el país-; un microscopio para cristalografía y un robot para cristalografía de proteínas.

La cristalografía estudia los cristales -que son agregados ordenados de átomos, iones, moléculas, proteínas-, determinando estructura molecular en tres dimensiones, con rayos X que permiten `ver´ las moléculas para diseñar y mejorar fármacos, estudiando cómo se unen a las proteínas de interés.

El estudio y comparación del mapa integral en un organismo en diferentes situaciones metabólicas o patológicas, permite identificar sustancias cuya presencia, ausencia o alteración se correlaciona con un estado fisiológico.

Vila contó que “con la técnica de resonancia magnética nuclear podemos estudiar plasma, suero, orina, y en un ensayo de cinco minutos, todos los metabolitos que están presentes”.

“Es una tecnología a nivel internacional, que permite establecer una ‘huella dactilar’ del estado de salud o enfermedad de un paciente en un tratamiento con determinado medicamento”, dijo.

Uno de los mayores logros de la plataforma fue haber alcanzado la resolución de las dos primeras estructuras tridimensionales de proteínas por difracción de rayos X, proceso hecho de manera integral en Argentina, desde el cultivo bacteriano hasta la obtención del modelo final.

Otra aplicación importante es la detección de biomarcadores que sirvan para verificar la eficacia de un nuevo fármaco en una fase de desarrollo precoz (fase clínica I), anterior al estudio de fase II que requiere invertir mucho dinero.

La metabolómica tiene como objetivo detectar metabolitos de bajo peso molecular en biofluídos, células, tejidos u organismos, e identificar cambios sutiles en sus concentraciones a través de la aplicación de métodos quimiométricos.

Vila planteó que “lograr capacidad de análisis de esos fenómenos requiere desarrollar recursos humanos con cinco a siete años de formación de alguien ya recibido: es una área de vacancia tanto en la parte básica (de investigación) como en la industria, y nos hemos formado todos en el exterior”.

“Los más veteranos volvimos en los ’90, hicimos un equipo en Rosario, aprovechamos la financiación para adquirir instrumental caro que no estaba disponible en el país y entrenamos a nuestros becarios parcialmente, pero tenían que terminar de formarse en el exterior”, reseñó.

A partir del funcionamiento operativo de la Plataforma, “Argentina puede evitar la fuga de cerebros, porque si hay gente a la que le gusta la metabolómica por vocación, no tiene que emigrar, ya que tiene acceso a tecnología de frontera en áreas analíticas de resonancia magnética nuclear y cristalografía por rayos X”, reivindicó Vila.

http://www.telam.com.ar/notas/201503/97266-analisis-biomedicos-de-excelencia-en-argentina.html

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